A lo largo del tiempo y sobre todo en los momentos que actualmente vivimos (año 2023) se dice mucho del dinero y se hace especial énfasis en creer que es nuestro principal activo. Lo cual a mi modo de ver es una afirmación que está muy alejada de la realidad.
Tanto es así que que de manera generalizada por la diversa cantidad de información que se difunde de manera masiva se ha creado una serie de creencias limitantes en torno al dinero, tales como:
- La cantidad de dinero que tienes en el banco determina tu valor.
- Si no tienes dinero, no tienes posibilidades.
- El dinero es la fuente de la felicidad.
- Tener dinero es malo.
- El dinero es sucio.
- Si no tienes dinero, no tienes nada.
Esto ha hecho que muchas personas desarrollen y posean sentimientos encontrados acerca del dinero, pues por un lado, piensan que no lo desean “por la publicidad negativa” mientras que por el otro, lo desean porque sin lugar a dudas es un instrumento necesario para satisfacer las necesidades de nuestro día a día.
Bajo esa premisa (nuestras creencias sobre el dinero) de manera inconsciente y de forma colectiva se va desarrollando la creencia de que nuestra utilidad o nuestro poder de acción está limitado cuando no lo poseemos, con lo cual no logramos avanzar ni seguir adelante y como resultado nos estancamos.
Esto se manifiesta a tal punto que muchas veces pensamos que no tenemos nada para ofrecer o que no podemos hacer algo porque no tenemos dinero. Pues bien, permíteme decirte que aunque el dinero facilita y contribuye en muchas de nuestras actividades, lo cierto es que el dinero no es nuestro mayor activo.
¿Si el dinero no es nuestro principal activo, entonces cuál o cuáles son?
Esta es una duda perfectamente entendible y más aún cuando lo único que nos dicen es que “sin dinero no somos nadie ni nada”. Por ello, me gustaría ayudarte a encontrar la respuesta que tanto buscas.
Muy bien, tus mayores activos, además del tiempo, son tus conocimientos y las habilidades que has adquirido durante tu proceso de crecimiento y que en cada experiencia has vivido a lo largo del tiempo. Pues ese conocimiento y esas habilidades son las que han permitido que desarrolles esas capacidades que hoy por hoy hacen que ejecutes de manera eficiente las tareas que te propongas.
Si bien algunas veces es necesario invertir cierta cantidad de dinero para adquirir nuevos conocimientos, la realidad es que vivimos en la era de la información y con el auge del internet podemos encontrar información de mucha calidad que nos permita adquirir nuevos conocimientos de forma gratuita.
Esto no quiere decir que debamos limitarnos a adquirir información gratuita únicamente. Tampoco quiere decir que nos limitemos a leer y a escuchar audios o ver videos gratuitos, pues lo cierto es que mucha de la información que circula a través del internet es sesgada o incluso falsa.
Asimismo, debemos evitar limitarnos a “consumir únicamente” sin ejecutar nada de lo aprendido, pues lo cierto es que sería lo mismo que saber toda la teoría para conducir y nunca hacerlo, no generamos ningún tipo de resultado diferente.
Por ello, mi invitación para ti es que dejes de poner el dinero como excusa para hacer las cosas y comiences a analizar tus conocimientos y tus habilidades y las coloques al servicio de los demás. Con ello, verás que el dinero aparecerá y más que un impedimento será un potenciador para alcanzar tus sueños.
¿Cómo puedo reconocer mis conocimientos y habilidades?
Antes de despedirme, me gustaría compartirte una serie de preguntas que te ayudarán a tomar mayor consciencia sobre los conocimientos y habilidades que posees actualmente:
- ¿Qué actividad me resulta fácil de realizar?
- ¿Qué tema me apasiona y cuánto sé sobre ese tema?
- ¿sobre que tema o área me gusta aprender y conversar?
- ¿Qué es eso que la gente dice que hago de forma natural?
- ¿Qué me gusta hacer en mi tiempo libre?
- ¿Cuáles han sido mis logros recientes y que he hecho para alcanzarlo?
- ¿Sobre qué área la gente me ha pedido consejos o mi opinión?
- ¿Qué es lo que la gente confía que puedo hacer de forma exitosa?
Tomarte el tiempo para responder estas preguntas te ayudará a tener mayor claridad sobre los activos con los que cuentas en este momento y con los cuales puedes comenzar desde ya a trabajar, a fortalecerlos y a ofrecerlos.
Dicho esto, me gustaría recordarte que el dinero no puede comprarlo todo y que aún cuando la cantidad de dinero que puedas tener sea poca (si ese es el caso), solo tú y nadie más que tú puedes crear tu propio éxito. Cree en tí, pues tienes todo lo que necesitas para avanzar y prosperar.
Ahora te pregunto, ¿Qué conocimientos y habilidades has descubierto en ti?
¡Comparte tu opinión con nosotros y este mensaje con quien lo necesite!
Te leo…